Grupos Hakuna

PREGUNTAS FRECUENTES (FAQ)



SOBRE LA ASOCIACIÓN

¿Cómo surge Hakuna? ¿Cuál es su origen?

Para ir a la JMJ de Brasil 2013, empezamos a reunirnos un grupo de universitarios. Queríamos prepararnos. Comenzamos, en la primera reunión, diez personas. Al principio una charla semanal, los lunes, que en poco tiempo decidimos terminarlas con un rato de adoración. Luego empezamos a cantar, después a tocar instrumentos, después a componer canciones. En julio nos íbamos 97 personas a Brasil durante un mes de voluntariado que culminaba con la JMJ en Río de Janeiro. Ese verano todos pedíamos por los mil que vendrían después.

Los voluntariados empezaron enseguida, en la Semana Santa nos fuimos un grupo a Tánger para ayudar, y el verano a Calcuta. Vinieron cinco amigos o parientes de Barcelona. A la vuelta quisieron empezar un grupo similar en Barcelona, pero el padre Manglano no lo veía porque no podía cuidarles. Esperaron, insistieron, y el verano siguiente tuvieron 12 plazas para los catalanes. A la vuelta fue imparable: en octubre de 2014 empezaba la primera charla y Hora Santa en Santa Inés, Barcelona. Lo mismo ocurrió con Valencia: dos universitarios que vinieron el verano a Albania, y empezaron en octubre siguiente. Y luego, por amigos, familias y traslados, se va extendiendo siempre el mismo estilo… Fuimos a presentar un disco de Hakuna a Mallorca, y unos cuantos de Palma quisieron empezar otro grupo allí.

Más tarde los padres quisieron vivir lo que estaban viviendo sus hijos. Fueron invitados como oyentes a un God Stop en febrero de 2017, y decidieron formar un grupo senior en Madrid. Luego en Barcelona, ahora están sacando otro de matrimonios en Zaragoza…

 

Y ¿por qué se llama Hakuna?

Aunque literalmente significa ‘No’, en sentido más amplio transmite que no hay problemas, vive y sé feliz, disfruta de la vida. Surgió en un bar, con el productor del primer disco, ante la necesidad de poner quién era el artista: Hakuna transmitía nuestro estilo. Y después del disco, al tener que denominar los grupos, Hakuna pasó de denominar solo al grupo de música para referirse a todos los grupos, y finalmente, a la Asociación misma.

 

¿Qué  es Hakuna?

Hakuna es una Asociación privada de fieles, aprobada por el Cardenal Arzobispo de Madrid, D. Carlos Osoro.

El Código de Derecho Canónico contempla las Asociaciones de fieles públicas y privadas. Las Asociaciones privadas de fieles son las que promueven los fieles, y las Asociaciones públicas de Fieles que son las que promueve y erige la Jerarquía Eclesiástica.

 

¿Qué es una asociación privada de fieles?

Según el Código de Derecho Canónico “Existen en la Iglesia asociaciones (...) en las que los fieles, clérigos o laicos, o clérigos junto con laicos, trabajando unidos, buscan fomentar una vida más perfecta, promover el culto público, o la doctrina cristiana, o realizar otras actividades de apostolado, a saber, iniciativas para la evangelización, el ejercicio de obras de piedad o de caridad y la animación con espíritu cristiano del orden temporal"  (c. 298)

Ejemplos de Asociaciones de fieles son las Cofradías (de Semana Santa, algunas advocaciones de la Virgen o de Cristo, etc.), las Hermandades...

“Los fieles tienen derecho, mediante un acuerdo privado entre ellos, a constituir asociaciones para los fines de los que se trata en el c. 298” (c. 299).

La característica fundamental de las Asociaciones Privadas de fieles es que es un acuerdo privado entre los fieles para promover el fin elegido.

 

¿Qué fines tiene Hakuna?

Según sus estatutos Hakuna tiene los siguientes fines:

  • ayudar al crecimiento de la vocación cristiana como ‘vida’: una vida nueva en el Espíritu, el estilo de vida de Cristo, una forma de estar propia; esta vida nos posee y se contagia; lo realiza creando espacios donde se comparte vida.
  • fomentar el empeño por esperar esta vida nueva desde la Eucaristía, cuidando Sagrarios, promoviendo adoraciones y Horas Santas y el deseo de que sea acompañado.
  • ayudar a que el hecho de arrodillarnos ante Cristo se traduzca en vivir arrodillados antes los demás, en una actitud continua de servicio en el día a día, con atención especial a los más necesitados mediante compartiriados, siendo éstos medios para fomentar la entrega a los demás mediante distintas actividades.
  • realizar actividades en las que este estilo de vida se contagie, principalmente, a personas alejadas de Dios: albergar el sentimiento de Cristo de que no se pierda ninguno.
  • ayudar a integrar lo espiritual y lo material: reflejar la belleza y alegría de Dios, aprender a disfrutar del presente y de lo que uno tiene entre manos, amar todo lo creado, profundizar en la presencia de Dios en nuestra vida, enseñar la dignidad de la materia, mostrar la unidad cuerpo-alma en la vida con Dios, buscar la progresiva espiritualización del cuerpo y encarnación de las realidades espirituales, permitir que la fuerza de la resurrección actúe.
  • fomentar la creación de música religiosa que transmita esta visión cristiana de la vida, música que lleve la vida a las adoraciones, canciones que enseñen a rezar y eduquen el corazón; esta expresión musical de la fe, bella y actual, es camino de evangelización, mediante conciertos y grabaciones.

 

¿Qué tipo de estructura tiene Hakuna?

Hakuna se estructura en Grupos Hakuna.

Dependiendo de las personas que quieran participar se formarán grupos de Universitarios, Profesionales, Frontera y Matrimonio. Cada grupo tendrá su coordinador del grupo. (Por ejemplo Hakuna Madrid Profesionales, Hakuna Barcelona Matrimonios...)

Un grupo Hakuna es coordinado por el Coordinador de grupo, junto con un Comité de grupo que lo forman quienes coordinan las distintas áreas de ese grupo (Horas Santas, Grupo de música, Compartiriados, Revolcaderos, Escapadas, God Stop, Redes Sociales, etc.). Quienes coordinan las distintas áreas de los distintos grupos, están relacionados para ayudarse y transmitirse experiencias. Todos los Coordinadores de grupo forman el Comité General de Hakuna.

 

¿En qué ciudades se encuentra?

Actualmente, hay Grupos en trece ciudades: Madrid, Barcelona, Valencia, Pamplona, Palma de Mallorca, Cartagena, Murcia, Alicante, Girona, Málaga, Granada, Lleida, Salamanca. En algunas ciudades están más desarrollados y en otras se encuentran en los inicios; en algunas hay hasta cinco grupos, en otras uno solo. En la app Hakuna tratamos de dar la información básica de cada ciudad.

 

¿Por qué surge la necesidad de crear un movimiento?

Entendemos que Hakuna es una realidad que ha movido el Espíritu Santo a partir de algunos de nosotros, que nos ha llevado adonde ninguno de nosotros preveía. Por eso hemos afirmado que Hakuna es un movimiento del Espíritu Santo. Por la dimensión que va tomando en distintas ciudades, conviene que tenga un reconocimiento de la Iglesia.

Es decir, entendemos que a una realidad carismática le ha llegado el momento de vestirle jurídicamente, el momento de introducirla institucionalmente en la Iglesia. Lógicamente, este paso es costoso, y sobre todo, no buscado ni deseado: cuando hay Vida, uno no desea Derecho.

 

¿Qué ventajas y riesgos tiene hacer de Hakuna una Asociación?

La institucionalización de una realidad viva tiene ventajas y riesgos. A grandes rasgos, podríamos decir que las ventajas van desde el orden que exige poner por escrito lo vivido, o la garantía de recibir la ayuda de la Iglesia para que velen sobre nuestro modo de actuar, hasta la ayuda que supone para poder crecer en otras ciudades sin desvirtuar el espíritu recibido en los orígenes del movimiento. No son poca cosa estas tres ventajas.

Los riesgos son grandes, también. Y destacamos también tres: la desvitalización de la vida ateniéndose más a las formas que a la vida; la necesidad de estructura y los nombres de quienes ocuparán cualquier puesto en esa estructura -realidad que facilita las comparaciones, críticas, divisiones, cotilleos y otros modos tan mundanos pero que sin duda son un riesgo que a todos amenaza-; y la necesidad de que haya socios -pues implica que habrá no socios, y esta distinción suponer el riesgo de ‘distinciones’ que se usen mal-.

 

Su promotor es el sacerdote José Pedro Manglano, ¿hasta qué punto está ligado Hakuna a su persona?

Hakuna nace de los jóvenes para los jóvenes. No son grupos de jóvenes llevados por un sacerdote, sino grupos de jóvenes que quieren compartir la fe, y piden a un sacerdote, o a varios, que les acompañen. Lógicamente la iniciativa personal del padre Manglano canalizó el inicio, pero está claro que el Espíritu ha ido transmitiendo este estilo propio de Hakuna a través de todos los que lo han ido viviendo.

Es inevitable que se focalice la atención en la persona que desde un principio ha intentado respetar, organizar y promover este espíritu, y este es José Pedro. Pero hay que señalar que desde el principio los jóvenes han sido protagonistas en las iniciativas y responsabilidades organizativas. Ahora mismo, como Asociación, la Junta de Servicio está formada por jóvenes que son quienes asumen la responsabilidad y toman las decisiones.

Es indudable el papel del padre Manglano, pero lo relativizaremos si pensamos que de las ciudades donde hay grupos Hakuna en marcha, a más de la mitad el padre Manglano no ha viajado, y esto no es obstáculo para que los jóvenes se organicen entre ellos y lo saquen adelante.

 

SOBRE LOS SOCIOS O MIEMBROS

¿Quién forma parte de Hakuna?

Forman parte de Hakuna todas las personas que participan en sus actividades. No importa el grado de participación y de implicación, lo que importa es vivir su espíritu de dar “vida”. Hakuna ha surgido por la iniciativa y buena voluntad de muchas personas que veían la necesidad de dar un testimonio cristiano y vivir su fe en todas las actividades de su vida compartiéndola con otros que se encuentran en sus mismas circunstancias.

 

¿Hay socios en Hakuna?

Sí, como toda Asociación tiene socios. Como hemos dicho antes todas las personas que participan de las actividades de Hakuna se sienten parte de Hakuna sin necesidad de ser socios. Si alguno quiere ayudar con su tiempo o tomar parte en las decisiones de la Asociación puede solicitar ser socio.

Cada persona tiene su historia personal de amor con Jesús y la condición de socio de Hakuna es una decisión meditada de dar un paso, de querer crecer en la entrega personal a Jesucristo por este camino concreto.

Esta entrega se traduce en entrega y servicio a una comunidad concreta, el grupo de personas con quienes comparte la fe, y siguiendo un estilo de vida concreto, aprovechando los medios que le ofrece Hakuna para crecer y madurar en su seguimiento de Cristo.

 

¿Existe alguna implicación económica en la figura del socio?

Ser socio no implica ninguna obligación económica ni cuota de ningún tipo. Los pocos gastos de mantenimiento de la Asociación se cubren con donativos.

 

¿Hay distinción entre  los socios de Hakuna de los que sólo participan de sus actividades?

No se distingue de ninguna manera externa. Es un aspecto interno, que lleva a querer ser los primeros servidores de los demás.

 

¿Hay distintas actividades para los socios y para los no socios?

No. Todas las actividades de Hakuna son para todo el que quiera, sin necesidad de un compromiso de asistencia o implicación. Todo es para todos, aunque eso no quita que en un momento concreto por una circunstancia concreta sea preciso convocar a los miembros.

 

¿La formación que ofrece Hakuna es suficiente?  ¿No puede quedarse un poco corto a veces, sólo con las Horas Santas?

Sería un error pensar que Hakuna son Horas Santas. Hakuna son grupos de personas que comparten la fe y siguen a Cristo “juntos”. La raíz de donde surge la vida de estos grupos es la adoración semanal, la Hora Santa. Pero la vida que surge de ahí se desarrolla y continúa en los compartiriados, revolcaderos, escapadas y otras mil maneras de vivir. 

Otro error es pensar que uno avanza más en su seguimiento a Cristo según el número de ‘cosas’ a las que se apunta. La obra del Espíritu se realiza en nuestro interior, en el silencio: a veces conviene menos actividades y más tiempo de silencio para dejarnos educar por el Espíritu en nuestro interior. No obstante, lógicamente, conviene formarse y que nos ayudemos unos a otros. La charla semanal que precede a la Hora Santa, los revolcaderos que ayudan a formar un criterio cristiano acerca de las verdades fundamentales del hombre y de nuestra fe, el acompañante espiritual, el God Stop, los God Break, la lectura habitual de un libro en torno a la fe cristiana… son medios a los que continuamente se alienta -como figura en los Estatutos- que cada uno incorpora en su vida en la medida y momento en los que lo pide el bien de su alma. 

 

¿Se puede entender Hakuna como una vocación, como tradicionalmente se ha entendido la vocación en la Iglesia?

Este no es un camino vocacional, según el sentido más restringido que se le da en la teología espiritual o en el derecho canónico. Es decir, que no exige una fidelidad de por vida y una implicación total de la vida bajo gravedad de conciencia. Es un camino que con libertad uno emprende y puede abandonar cuando considere que su vida espiritual entra en otra etapa en la que necesita dirigir sus pasos de otra manera.

Sí es vocacional si partimos del planteamiento de que la vocación innata de todo ser humano es la de amar y ser amados, como dice Juan Pablo II en Familiaris consortio. Y esta vocación se va concretando en los pasos o etapas de la vida, siempre ayudado en el discernimiento por quien acompaña espiritualmente. Pero conviene no confundir la ‘vocación’ con los ‘estados de vida’. La vocación es más que los estados de vida.

En la historia de amor con Jesucristo que cada uno vive, se despierta –como en cualquier historia de amor- el deseo de hacer actos de entrega al amado. Cuando mi alma me pide entregarme, un modo concreto –entre otros muchos- es decidir libremente “pringarme” sirviendo a la Iglesia y andando el camino en la comunidad que es Hakuna.

 

¿Qué supone la realidad del socio o miembro?

Es un privilegio que haya miembros. Tratemos de decir qué supone.

En el fondo, ser socio no es más que la dimensión social de algo personal e íntimo, pero que no mata lo íntimo sino que lo pone al servicio de la comunidad.

Conviven dos dimensiones al mismo tiempo:

a) El socio tiene una dimensión societaria, por la cual pasa a formar parte de una Asociación, y tiene unas obligaciones societarias muy sencillas pero imprescindibles: elección de órganos y disponibilidad para sacar adelante la asociación en cuanto asociación.

b) Por otro lado, tiene una dimensión espiritual. Esta no es más que la realización formal de una entrega a Jesucristo y a su Iglesia, para servirle según el estilo de vida que subraya Hakuna: de alegría, servicio y seguimiento en comunidad -con otros-, de aprender a vivir arrodillados ante Cristo en la Hostia y en los hermanos y en la creación, de hacer de la vida una fiesta y de la fiesta momentos de Vida.

 

Este deseo de ser más de Jesús, y de seguir los medios que Hakuna facilita, de saberse en una camino concreto como seguidores de Cristo, con sentido de pertenencia, sabiéndose acompañado de una comunidad, es la realidad más verdadera del miembro.

 

Lo ideal es que quienes participen de la dimensión societaria de la figura del socio sean quienes desean su dimensión espiritual, ya que ésta es su razón de ser.

Es bueno que la comunidad viva la llegada de un nuevo socio en su comunidad. Por eso, habrá periódicamente una Celebración de nuevos miembros, en la que ante el Santísimo y ante su comunidad, el candidato realizará su acto libre de seguir al Señor y de servir a la Iglesia por ese camino acompañado y acompañando al resto del grupo.

 

 

SOBRE LA RELACIÓN DE HAKUNA CON OTRAS INSITUCIONES DE LA IGLESIA

¿Cómo se relaciona Hakuna con otras realidades eclesiales?

Desde sus inicios en 2014 Hakuna vive de la mano de multitud de instituciones, diócesis, movimientos, etc...  Se han realizado compartiriados con las Misioneras de la Caridad, ONG´s locales, diócesis extranjeras como Tánger e India, los God Stop se han realizado con Comunidades religiosas (Iesu Communio, Hermanitas del Cordero, Religiosas Cistercienses de Buenafuente del Sistal, Carmelitas Descalzas....), hay sacerdotes que acompañan a los grupos (la mayoría son diocesanos, y también algunos religiosos, castrenses o  del Opus Dei...).

 

¿Qué relación o vinculación tiene Hakuna con el Opus Dei, ya que su promotor pertenece a esa institución?

Hakuna y el Opus Dei tienen la misma relación insitucional que Hakuna con los Salesianos, las Misioneras de la Caridad o los Jesuitas, o la misma que tiene con el movimiento Neocatecumenal o con Comunión y Liberación. Es una Asociación con su propio modo de obrar, independiente de cualquier otra institución. A la vez trabaja con todas ellas en la nueva evangelización, unidos pero no confundidos.

Ha habido quien ha interpretado que era una escisión del Opus Dei, otros que es una estrategia nueva para presentar otra cara de esta institución, otros que es una versión actualizada –por fin mixta- del apostolado del Opus Dei. Ninguna de ellas es cierta. Ni siquiera se acercan a la realidad. Es sencillamente una asociación que surge a partir de un grupo de jóvenes universitarios convocados por el padre Manglano para ir a la JMJ de Brasil, fuera del ámbito de los centros del Opus Dei: ese es su germen, y así se ha mantenido.

A quien le cueste aceptar este hecho y mire con sospecha, quizá necesite abrirse a la realidad espiritual de la Iglesia: el Espíritu aviva lo que quiere en quien quiere.

En la historia reciente de la Iglesia se repite esta situación: sacerdotes pertenecientes a una institución de la Iglesia que, sin abandonar su vocación personal, crean instituciones distintas a la suya y autónomas de ésta. Ya lo dice la Escritura: el Espíritu sopla cuando y donde quiere.

 

¿Alguna institución vela o interviene en el Gobierno o las orientaciones de Hakuna?

Hakuna es autónoma, tiene sus órganos de gobierno propio y depende exclusivamente de ellos con la supervisión del Arzobispado de Madrid.

 

La adscripción a algún movimiento, asociación (tanto política, social o religiosa) ¿es obstáculo para participar en Hakuna o ser socio de Hakuna?

Como aparece en los Estatutos todo católico mayor de edad, que quiera participar es sus actividades y vivir sus fines, puede ser parte de Hakuna. Compartir la fe con otros en un grupo Hakuna es compatible con la participación en otras asociaciones. De todas formas, nuestra ambición es llegar a alejados de Dios y de la Iglesia.

 

¿No hacen falta más curas? ¿Tiene que ser un sacerdote el que empiece Hakuna en una nueva ciudad? ¿Se puede empezar sin él?

Los grupos Hakuna no son formados por un sacerdote que monta un grupo de personas, sino que Hakuna son los mismos laicos. Pero sí que cada grupo busca algunos sacerdotes que les acompañen en sus actividades, para el trabajo pastoral y sacramental: para la exposición y bendición de las Horas Santas, para confesar mientras tanto, si es el caso para dar algunas de las charlas semanales que preceden a la Hora Santa, para las Escapadas... En unas ocasiones es el mismo párroco, en otras no; cada grupo ha tenido su propio recorrido: algunos han empezado sin sacerdote, otros tienen uno que se limita a apoyarles en las Horas Santas, otros se implican en el resto de actividades… En cada caso, la solución que mejor se adapta a las personas y sus circunstancias. Son muchos ya los sacerdotes que colaboran con las actividades de Hakuna, pues son 20 los grupos que hay en las distintas ciudades.

Otro aspecto que se potencia en Hakuna es que cada uno busque una persona que le acompañe espiritualmente. En muchos casos será el que acompaña al Grupo, su párroco, una religiosa, un antiguo profesor o un adulto cualificado del colegio, o algunos otros de Hakuna preparados para este servicio… 

 

 

SOBRE  SUS ACTIVIDADES

¿Qué tipo de actividades tiene Hakuna?

Las actividades son múltiples y surgen de la necesidad de vivir la fe con otras personas, transmitir “vida” y buscar a Cristo en las personas necesitadas. Incluye Horas Santas, Revolcaderos, God Stop, God Break, Compartiriados, Escapadas, Encuentros diversos, Conciertos..... Estas actividades se pueden ampliar con todas las formas posibles que existen de pasarlo bien unos amigos con ganas de transmitir la “vida”.

 

¿Qué son las horas santas?

La Hora Santa, con su charla previa, la organizamos semanalmente en una iglesia de la ciudad que nos dejan durante esa hora para tener la adoración. Las Horas Santas las celebramos a última hora de la tarde.

Los ponentes de las charlas son variados. Siguen un temario, y en ocasiones la charla es testimonial. Cuidamos la música todo lo que podemos –siempre hay un coro que prepara las canciones y ensaya–. Aprendemos a orar con canciones. Nos apoyamos sobre todo en las canciones de Hakuna Group Music.

 

¿Qué son los revolcaderos?

Se trata de revolcarse en consideraciones en torno a un tema concreto. Quienes quieren, forman grupos estables y pequeños -entre 7 y 15 personas-, que se reúnen dos veces al mes. Estas reuniones tienen lugar en horario y lugar fijo -un lugar tranquilo que venga bien a la mayoría, ya sea en la casa de uno, en un bar o en cualquier otro sitio-.

En primer lugar y de manera prioritaria, el objetivo es compartir la fe con otras personas, en un ámbito más íntimo, con la intención de que esa pequeña comunidad viva con más intensidad el hecho de acompañarse unos a otros en el seguimiento y conocimiento de Cristo. Todos vamos del brazo, pero es posible realizarlo más personal e íntimamente en pequeñas comunidades, grupos o células. Podríamos describir este primer objeto de los Revolcaderos con una sola palabra: cuidarse entre los miembros del grupo.

En segundo lugar, profundizar en algunas cuestiones, aumentar la formación, ir siendo capaces de ser personas de criterio, asimilar con mayor profundidad los planteamientos cristianos, enriquecerse de la visión y experiencia de otros...

 

¿Qué son los God Stop?

A lo largo del año proponemos varios fines de semana para retirarnos de God Stop. Estos rasgos los caracterizan:

1. Le llamamos "Parada de Dios", pues es un fin de semana dedicado a Dios, solo a Dios.

2. Paradas de fin de semana en las que huimos del mundo para entrar en uno mismo, y sintonizar con Dios.

3. Los hacemos siempre sumándonos a la vida de alguna comunidad contemplativa: lugares donde la gente que vive allí vive para orar.

4. Vivimos todo el tiempo en silencio: silencio exterior para favorecer la escucha de nuestro espíritu y del Espíritu que ahí habita.

5. Cantamos con la comunidad Laudes, Vísperas y Completas, y aprendemos a gozar con la Liturgia.

6. El resto de los tiempos lo vive cada uno por su cuenta, con grandes ratos con el Santísimo expuesto; cada mañana o tarde la terminamos con una Hora Santa; los ratos de silencio comienzan con algunas ideas o sugerencias, o temas que se plantean para que los trabaje cada uno.

7. Siempre tenemos un encuentro informal, un locutorio, con la comunidad que allí viven.

8. Siempre lo proponemos a amigos, especialmente a quienes están alejados de Dios: todos somos buscadores.

Unos God Stop van dirigidos a universitarios y jóvenes profesionales, otros a matrimonios, como una ayuda a sanar las heridas que puedan haber surgido, con el deseo de que el Espíritu les lleve a la frescura del primer amor. Otros son específicos para los Grupos Frontera.

 

¿Qué son los God Break?

En cada Grupo Hakuna hay un coordinador de los God Break, coordinado a su vez con los coordinadores de los otros Grupos Hakuna.

Una vez al mes se organiza un God Break para aquellos a quienes les pueda ir bien. Es como un mini-God Stop. Su duración suele ser de 3 horas. Su actividad es fundamentalmente la adoración al Santísimo.

Cada uno se centra en un tema específico. Su objetivo es hacer un parón cada mes para rezar a gusto y con más profundidad.

 

¿Qué son los compartiriados?

A los trabajos llamados de acción social o voluntariados preferimos llamarlos compartiriados porque queremos subrayar que son ratos en los que compartimos cada uno lo suyo: quizá ellos su enfermedad y nosotros nuestras salud, ellos su pobreza material y nosotros nuestra buena situación… No queremos ir a dar: queremos compartir. A veces colaboramos con instituciones que trabajan para personas con alguna necesidad, pero tratamos de buscar necesidades específicas no cubiertas, o acercarnos a ellos con creatividad. Los grupos de matrimonios realizan compartiriados en los que puedan aportar como matrimonio. Sobre todo queremos que les llegue la misericordia de Dios a través de nosotros, y a nosotros a través de ellos.

 

¿Qué son las escapadas?

Sobre todo en periodos vacacionales o fines de semana, se organizan escapadas que pueden ser largos compartiriados o peregrinaciones o excursiones, en las que se comparte vida. Son ocasión de que personas alejadas conozcan la vida de los cristianos.

 

¿Qué son los encuentros Hakuna?

Con cierta frecuencia se organizan encuentros para las personas de distintos grupos, compartir, conocerse, y transmitirse experiencias.